¿Has notado alguna vez que la velocidad de tu conexión a red Wi-Fi es más lenta? Esto es algo que le pasa a muchos usuarios y no saben qué hacer. Una de las posibles razones por las que hay una pérdida de velocidad en la conexión a internet, se debe a que alguien ajeno a tu hogar, esté utilizando nuestra red Wi-Fi sin nuestro permiso. Aunque tengamos una clave de acceso o contraseña y pensemos que estamos totalmente seguros, hoy en día hay muchas aplicaciones y programas para poder descifrarlas.

Según el  informe del Instituto Nacional de Tecnologías de la Comunicación, actualmente INCIBE Instituto Nacional de Ciberseguridad, hay un 12% de internautas españoles que practican el robo de Wi-Fi, delito tipificado en el código penal.

Entonces, ¿Qué hacemos ante este panorama? 

Probablemente, cuando te instalaron el router en casa, te dieron una contraseña con muchos números y letras, pero hoy en día, existen muchos programas y aplicaciones para hackear las contraseñas de los routers, así como herramientas que también permiten detectar dispositivos extraños que no hemos autorizado. Por lo tanto debemos cambiar esa contraseña que nos viene por defecto en el router Wi-Fi por una contraseña lo más robusta posible. Esto es, una contraseña entre 5 y 10 palabras, que contenga números y mayúsculas. Por ejemplo: Conocí a Paula una tarde de otoño del 2003. 😉

Los problemas que podemos tener si no cambiamos la contraseña de serie que nos viene en el router, no son sólo de lentitud en la conexión, puedes quedarte sin internet en un momento crítico, eres responsable de todo lo que hagan conectándose a través de tu IP, que sería como el DNI de tu router, pueden ver tus contraseñas, mails, conversaciones, páginas que visitas.

¿Quieres más motivos para cambiar la contraseña?